Se acercan los días en los que la exposición a la radiación solar es inevitable (aunque no debemos olvidar que esta también sucede en invierno). Atrás quedaron los tiempos en que la Nivea, en el mejor de los casos, o las cremas de té y zanahoria, eran el modo de preparar la piel para el sol. Aún estás a tiempo de ayudar a tu piel a protegerse y reparar los daños que provocan los diferentes rayos con la nutricosmética solar 180 the concept.
Hay una conciencia mucho mayor sobre los daños que producen los rayos solares y lo importante que es cuidarse. Hay diferentes barreras que deben complementarse para obtener la protección adecuada, unas no excluyen a otras sino que actúan conjuntamente para lograr que nuestra piel no sufra.
La protección más evidente es la de barrera física, con sombreros, gafas y prendas holgadas y que transpiren. Otra protección indispensable son los filtros solares, siempre seleccionando con cuidado aquellos cuya composición no genere efectos no deseados y cuyo índice sea el adecuado para nuestro fototipo. Pero hay un nuevo aliado indispensable que cada vez recomiendan más dermatólogos y esteticistas, los Nutricosméticos Solares.
El sol, ¿amigo o enemigo?
En realidad ambas cosas. El sol es ese amigo necesario al que hay que visitar en pequeñas dosis para evitar males mayores. Sin él no podemos vivir:
- Nos ayuda a sintetizar vitamina D, imprescindible para fijar el calcio en nuestros huesos, lo que hace que tanto estos como nuestros dientes se fortalezcan.
- Mejora el aspecto de la piel, especialmente para aquellas personas que sufren de ciertos tipos de acné. La psoriasis o la ictericia disminuyen sensiblemente también cuando tomamos baños de sol.
- Fortalece nuestro sistema inmune. El sol, tomado con moderación, ayuda a producir mayor cantidad de glóbulos blancos, los encargados de defender a nuestro organismo de agresiones externas como las infecciones.
- Mejora el estado de ánimo. La radiación solar fomenta la producción de serotonina, un neurotransmisor que es, además, un antidepresivo natural que fomenta, por otro lado, mejores ciclos de sueño y mejor respuesta sexual. ¿No os ha sucedido nunca que un día soleado en medio de muchos días grises hace que os sintáis de mejor humor? Esa es la razón.
Consecuencias de una exposición no controlada a la radiación solar.
No podemos olvidar que el sol también nos puede afectar gravemente si no nos exponemos a él con cuidado y moderación:
- Nos exponemos a quemaduras. Si no protegemos convenientemente nuestra piel ni la preparamos para el sol (y si, además, lo tomamos en horas de máxima radiación), nos arriesgamos a que nuestra piel se enrojezca en el mejor de los casos y a que tengamos lesiones como ampollas, quemaduras, etcétera, en el peor.
- Aumentamos el riesgo de cánceres de piel. El melanoma, el carcinoma (tipos de cáncer de piel especialmente agresivos) y otros procesos cancerígenos en la piel están directamente relacionados con un exceso de horas al sol o una falta de protección frente a este.
- Trastornos oculares. Nos arriesgamos a daños temporales o incluso crónicos, incluyendo las cataratas.
- Envejecimiento prematuro de la piel. Seguro que lo habéis visto en alguna ocasión: las personas excesivamente bronceadas suelen presentar una piel con mayor tendencia a la sequedad y a las arrugas. De hecho, buscamos una piel bronceada pero sana, no excesivamente castigada por el sol. Si los rayos UVB son los responsables directos de los procesos cancerígenos, los UVA inciden en la capa subcutánea y destruyen el colágeno y la elastina, por lo que la piel presenta ese aspecto como acartonado y con arrugas muy pronunciadas.
Nutricosmética Solar, la Fotoprotección Oral que cuida, repara y protege del daño solar.
El uso de Nutricosmética solar ha aumentado gracias a la toma de conciencia del envejecimiento prematuro que produce el sol. Algunas personas acuden a ella por el incremento de manchas en la piel, o por un mayor conocimiento del daño que los diferentes rayos hacen al colágeno y la elastina y la consecuente pérdida de firmeza del tejido y aparición de arrugas. También son cada vez más frecuentes los casos de eritema y erupciones cutáneas debido a alergias solares.
La Nutricosmética Solar 180 the concept actúa desde varios frentes:
Prepara la piel mejorando sus defensas.
Repara los daños de los radicales libres gracias a la presencia de antioxidantes.
Restaura los niveles de hidratación.
Propicia la regeneración de los tejidos.
Las fórmulas E4+E5+H6 se componen de una cuidadosa selección de nutrientes específicamente diseñada para la preparación, protección y reparación del daño solar. Se estimulan las defensas de la piel, frena la inflamación y la oxidación celular y repara los tejidos tras la exposición solar. Estimula la reparación de los tejidos.
Recomendamos tomarla un mínimo de tres meses antes de la exposición solar y puedes mantenerlo durante todo el año si lo deseas, el sol no descansa en invierno.
¿Por qué funciona la Nutricosmética Solar 180 the concept?
Preparamos la piel.
Gracias a ingredientes como Algas Chlorella, Espirulina, Ginkgo, Vitamina D3, Equinácea y un ingrediente clave como es el Betacaroteno. La acción en sinergia de todos estos activos ayudan en diversas maneras. Eliminar toxinas, aumentar la tasa de melanina, propician la regeneración celular, previenen el deterioro de las células y actúan como antioxidantes.
Protegemos frente a la radiación solar y los radicales libres.
Gracias a una gran selección de antioxidantes como Ester C, Vitaminas A y E, Bromelaína, Té Verde y Extractos Secos de Fruit & Greens. Logramos combatir los radicales libres, aumentar las defensas de la piel, se propicia el colágeno y elastina y la salud vascular. Algunos activos tienen propiedades antibacterianas.
Otro grupo de ingredientes ayudan a combatir el estrés oxidativo, estimulan el colágeno y la regeneración de los tejidos. Se trata de activos como N-acetilcisteína, L-Arginina, L-Ornitina, Ácido Glutámico y L-Metionina.
Recuperamos su salud reparando daños.
Toca restablecer la hidratación perdida, favorecer la reparación de los tejidos dañados, combatir la inflamación, nutrir y evitar la aparición de manchas. Para esta finalidad se incluyen ingredientes en el Plan de Nutricosmética Solar como: la Vitamina J (Colina Bitartrato), Tiamina, Riboflavina, Niacina, Acido Pantoténico, Piridoxina), Inositol), Biotina y Acido fólico. Además de 11 minerales que consiguen un efecto conjunto de reparación.
¿Qué otros consejos puedo seguir para proteger la piel del Sol?
- Hidratarse y comer bien. No puede faltar el agua cuando nos exponemos al sol. Hidratarse y alimentarse para que nuestra piel esté sana son aspectos fundamentales que nos ayudarán a mantener ese aspecto joven y terso que anhelamos. Los alimentos con Betacaroteno, Vitaminas y Antioxidantes nos ayudarán a proteger la piel y obtener un tono dorado.
- Protección… en todos los aspectos. Que no te falte nunca una buena sombrilla, una gorra o pamela, unas gafas y, sobre todo, protector solar. Pero ojo: con un factor de protección alto o muy alto (sobre todo si no eres muy morena de piel), porque, aunque pases el día bajo la sombrilla, esta deja pasar un 35% de la radiación a través de la tela.
- Moderación en los baños solares. Exponte al sol de manera progresiva: 10 minutos el primer día, 15 el segundo… y así sucesivamente. Pero procura que ningún baño solar sea superior a 30 minutos (hablamos, claro está, de exposición directa).
- Renueva tu crema protectora. Aplícala por primera vez unos 30 minutos antes de exponerte al sol por primera vez y renuévala cada vez que te bañes, cada vez que sudes en exceso o, en cualquier caso, cada dos horas si ninguna de las otras dos cosas sucede.
- Evita las horas centrales del sol. Entre las 12 del mediodía y las 4 de la tarde los rayos del sol son especialmente potentes, por lo que te recomiendo que evites una exposición directa en esas horas. Mantente bajo la sombrilla, debidamente hidratada por dentro y por fuera o, si puedes, bajo techo.
- Cuidado con los días nublados. Las peores quemaduras solares que he visto provienen de esos días. Las personas, debido a que el sol calienta menos, no perciben el calor que activa nuestra alarma y o bien no se protegen o bien se olvidan de renovar la crema solar. Los rayos pasan a través de las nubes del mismo modo que si estas no estuvieran. Hay que tomar las mismas medidas que en un día soleado.
- El deporte al sol también cuenta como exposición directa. Si decides tomar el sol de manera activa, ¡mucho mejor! Pasear, correr, jugar a las palas…, son excelentes maneras de disfrutar de un día de sol. Pero estamos igualmente expuestos a sus efectos nocivos. Protégete de la misma manera que si estuvieras tumbada en la hamaca.
- ¡No te olvides de nuestra Nutricosmética!