Hay mitos y verdades de las vitaminas que es preciso desterrar o, al menos, matizar. Desde el «tómate el zumo que se le van las vitaminas» a aseverar que las vitaminas son tóxicas. Podemos encontrar todo tipo de afirmaciones de unas sustancias que sabemos que necesitamos, pero no siempre tenemos claro qué son, os aclaramos tres de los mitos más frecuentes.
¿Qué son las vitaminas?
Las vitaminas son compuestos esenciales para el correcto funcionamiento del organismo. No hay más que ver la raíz de la propia palabra, vita-, que es vida en latín. Sin las vitaminas, nuestra existencia no sería viable. La mayoría de ellas no las sintetiza el cuerpo humano, por lo que se hace imprescindible ingerirlas a través de la alimentación.
¿Por qué son tan importantes?
Las vitaminas son imprescindibles para multitud de funciones de nuestro organismo. Por citar solo algunas:
- Formación de tejidos
- Salud de las células de la sangre
- Buen funcionamiento del sistema nervioso
- Combatir los radicales libres
- Salud de la piel
- Correcto funcionamiento de la vista
- Sistema inmune equilibrado, y un largo etcétera.
Es decir, sin ellas, o con bajas dosis, nuestro cuerpo se vería seriamente afectado.
Cada una de las vitaminas cumple funciones esenciales en nuestro ciclo vital. Por poner algunos ejemplos:
Vitamina A. Fortalece el sistema inmune, huesos y dientes, mejora la vista y es un excelente antioxidante.
Vitaminas del grupo B. Mantienen el sistema nervioso en óptimas condiciones, contribuyen a la salud del cabello, piel y uñas.
Vitamina C. Potente antioxidante, propicia la síntesis del colágeno, ayuda a la asimilación del hierro, unifica el tono de la piel.
Mitos y verdades de las vitaminas 1: las produce el cuerpo humano
Mito… o casi. Solo una de ellas, la D, la puede llegar a sintetizar nuestro organismo, y siempre con la ayuda de la exposición a la luz solar. El resto las debemos tomar del exterior. Bien mediante los alimentos, bien en forma de suplementos.Como los Nutricosméticos 180 the concept.
Frutas y verduras son en términos generales la mayor fuente de vitamina C. Las del grupo B las podemos encontrar tanto en los alimentos de origen animal como en los cereales, legumbres, vegetales. En la mayoría de los alimentos encontramos más de una vitamina.
Mitos y verdades de las vitaminas 2: son tóxicas.
No en su justa medida. Aquí me detendría a valorar cada una de ellas. Hay, en esencia, dos grupos de vitaminas.
Las liposolubles (A, D, E y K). Se disuelven en aceite y se almacenan en los tejidos de nuestro organismo. Las hidrosolubles (la C y el grupo B). Se disuelven en agua y que por tanto se eliminan con mayor facilidad. Las vitaminas liposolubles son necesarias, pero no hay que exceder la dosis, y las hidrosolubles no suelen resultar tóxicas si se toman en exceso (salvo la B3 o niacina, que puede causar una grave enfermedad llamada pelagra).
¿Quiere esto decir que es preferible no tomarlas? Ni mucho menos. El exceso de algunas vitaminas (hipervitaminosis) y la falta de cualquiera de ellas (hipovitaminosis) pueden ser motivo de enfermedades muy serias. Hay que tomar la cantidad precisa. Ni más ni menos.
Mito y verdad 3: tomar vitaminas rejuvenece.
En general, es verdad. La mayoría de ellas inciden directamente en la salud de piel, cabello y uñas. Además son potentes antioxidantes, por lo que frenan el efecto de los radicales libres que inflaman y oxidan nuestras células. Son unas grandes aliadas del antiaging. Si a esto sumamos que alguna spropician la síntesis del colágeno, o que fomentan la renovación celular, estamos hablando de unas indispensables para un aspecto joven.
Esta es la razón por la que muchas de nuestras fórmulas nutricosméticas contienen vitaminas para potenciar el efecto antiaging que deseamos. Siempre en unas cantidades saludables y presentadas del modo que mejor se preservan sus propiedades.
Esperamos haberte resuelto estos tres mitos y verdades de las vitaminas. En resumen, las vitaminas son absolutamente esenciales para nuestro organismo. Se han de tomar en las cantidades precisas, influyen directamente en la ralentización del proceso de envejecimiento y necesitamos tomarlas porque nuestro cuerpo por sí solo no las fabrica. Si te has planteado un tratamiento antiaging 180 the concept te ofrece fórmulas con principios activos de la mejor calidad. Además de cócteles de vitaminas ajustados a tus necesidades, te aportan muchos otros nutrientes esenciales para que el tiempo parezca no pasar por ti. Pide cita en el centro más cercano e infórmate sin ningún compromiso.